La primera vez que vi un meme, me pareció que era la ocurrencia de una persona hábil, el gusto fino, potente y casi subliminal era muy poderoso. Si bien en ese momento lo percibí como un acierto, en ese momento nunca pensé que los memes pudieran tener ese impacto tan grande dentro de comunicación del ser humano.
Hace meses surgió dentro de la empresa, la presentación de un proyecto cultural entorno al Meme, si bien mi primera impresión fue expresar una sonrisa ante tal propuesta, cuando empezó mi revisión es indudable que mi cara cambio a una que expresaba sorpresa, susto y al final se convirtió en una cara que expresaba una gran motivación.
En otra publicación les comentaré del proyecto que menciono y que ya está desplegado en Ethereum, pero en este artículo quisiera remontarme a principios del año 2019 en donde había leído una tesis acerca de la comunicación de los jóvenes mediante los memes, si bien ese material me fue de gran ayuda para entender como estaba comunicando y siendo comunicado mi hijo que en ese momento tenía esa edad, fue mi primer acercamiento a entender este fenómeno cultural.
Pasado un año de eso, paso un hecho muy revelador en mi vida y en la forma como iba a entender esta nueva corriente cultural. En esos entonces, dentro de nuestra empresa teníamos una campaña en la que regalábamos BNB a las personas que nos seguían en las redes sociales, esta campaña tenía la intención de acercarnos a la comunidad y la de promocionar la criptomoneda BNB, para lo cual se creó un video invitando a realizar esos pasos y señalábamos la mecánica de la entrega de la criptomoneda. En ese tiempo cuando recibí el video editado, me sentí muy orgulloso del trabajo realizado en esa campaña, el mensaje era claro y motivador, en ese momento de análisis y regocijo mi hijo me recomendó que vea una serie de youtube que le gustaba, esta trataba de un video Review en donde con un video lleno de memes se resumía toda una serie de horas de material, al comienzo me pareció raro, pero luego gracioso y entretenido. Así que le dije, ¡mira! dentro de la empresa hicimos este video, crees que lo puedes hacer con el formato de ese video meme, su respuesta fue un rotundo SI, ¡este momento me pongo a trabajar en ello! – lo dijo con una emoción que desbordaba a la vista, si bien no fue una edición de minutos sino se convirtió en una edición de toda una tarde que termino remplazando todos nuestros planes de diversión del último día que tenía de vacaciones conmigo, el resultado fue magnifico.
El video que resulto no solo que me divirtió, sino que logro esa conexión que tanto buscábamos dentro de nuestra empresa y en especial con esa campaña. Su éxito fue indiscutible y único en el mundo cripto.
Fue en ese momento en donde mi interés por el mundo de los memes cambio de ser una simple apreciación de entretenimiento a ser una materia de estudio que obligaba a profundizar.
Al revisar la literatura que hay en internet me di cuenta de que ya habían existido excelentes trabajos de investigación acerca de la comunicación con memes, de su importancia y de su gran impacto en la sociedad, al parecer mi sorpresa había sido el descubrir el agua tibia. Pero sabiendo que era un neófito en la materia me encantó la idea de querer profundizar en este estudio, de forma que revisé cuanto artículo y tratado de memes existían para conocer y entender más esta cultura.
Llegar a manejar conceptos como que “los memes son la mejor forma de comunicación que existe” es una pastilla que cuesta digerir a personas de mi edad, hablar de Ingeniería del meme y de la Memética (Memeticist en inglés) al inicio parecía una forma de decir que ya me volví infantil, pero al revisar más trabajos de antropología, entre esos trabajos de doctorado acerca de la evolución y el poder de los memes, me llevo a generar un gran respeto por los que realizan los memes ya que resulta un verdadero arte o más bien se puede decir ciencia el saberlos desarrollar con la calidad que amerita una buena comunicación.
Hoy por hoy, esta corriente cultural está afectando todos los aspectos de nuestras vidas, desde la parte personal hasta la económica, de ahí que los memes no pudieron dejar de estar presente en el mundo de las criptomonedas y es ahí donde inicia esta fusión de dos corrientes, por un lado, la corriente cultural de comunicación por memes y por otro lado la corriente económica de las criptomonedas y la blockchain.
¡Que magnifica combinación! – pensé, 2 revoluciones en su máximo esplendor fusionándose en algo nunca visto, es necesario que nuestro interés sea mayor y oportuno en este nuevo paradigma de comunicación cripto.